"Algún día un pobre rival pagará por las ocasiones que fallamos". Palabra de Mourinho en la rueda de prensa posterior al partido contra el Ajax de Liga de Campeones. Está claro que, tras lo visto en el Bernabéu, el pobre rival fue el Deportivo.
El Madrid había marcado sólo seis goles en Liga en las cinco primeras jornadas, es decir un tanto cada 75 minutos ligueros. Ante el Deportivo, anotó los mismos goles pero en sólo 90 minutos, o lo que es lo mismo, marcó un gol cada 15 minutos.
El duelo de ayer frente al Deportivo fue una fiesta para la parroquia blanca. Con el césped recién plantado y bajo una llevia intermitente, que no invitaba a acudir al estadio, las gradas del Bernabéu sin embargo sí registraron una buena entrada. Y difícilmente se arrepentirían de acudir porque disfrutaron con el 6-1 del Real Madrid, con dos goles de Cristiano Ronaldo, Özil, Di María, Higuaín y Zé Castro en propia puerta.
La peor noticia para el Madrid fue que recibió un gol, el primero en el Bernabéu, obra de Juan Rodríguez. Hasta ahora, Casillas sólo había visto perforada su portería en Anoeta con un gol de Tamudo.
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